Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en adultos. En torno al 30% del total de las muertes se debe a este tipo de patologías, siendo la más común la cardiopatía isquémica (infarto agudo de miocardio, angina de pecho, etc.).
Hace ya tiempo que se han desarrollado una serie de teorías que abogan por la existencia de una relación a distancia, directa o indirecta, entre una patología a nivel bucal y el resto del organismo, y viceversa.
¿Existe relación entre problemas orales como la periodontitis y las enfermedades cardiovasculares?
Numerosos estudios indican que existe una relación estrecha entre la enfermedad periodontal y la enfermedad cardiovascular. Existen mecanismos biológicos que justifican esta relación:
Las enfermedades periodontales son infecciones que generan una respuesta inflamatoria con efectos en el resto del organismo. También es conocido que la enfermedad cardiovascular arteriosclerótica es fundamentalmente un proceso inflamatorio.
Las bacterias y sus productos pueden viajar a través de la sangre, provocando inflamaciones a distancia o incluso pueden establecerse dentro de las placas de ateroma (lesiones en las arterias provocadas por niveles elevados de colesterol).
Algunas bacterias de la enfermedad periodontal tienen la capacidad de alterar la expresión de genes que codifican proteínas que aumentan la inflamación y la aterosclerosis en las arterias coronarias (los vasos que suministran sangre al corazón).
Un estudio reciente realizado en la Universidad de Granada demuestra por primera vez la relación positiva entre la gravedad y la extensión de la enfermedad periodontal y el tamaño del infarto de miocardio. (Marfil-Alvarez R, Mesa F, Arrebola-Moreno A, Ramírez-Hernández et al. Acute miocardial infarct size is related to periodontitis extend and severity. J Dent Res 2014; 93: 993-998.).
Las infecciones crónicas como la periodontitis pueden jugar un papel importante en el origen y desarrollo de las enfermedades cardiovasculares. Incluso, la presencia de periodontitis podría doblar el riesgo de mortalidad.
Las guías de la Sociedad Europea de Cardiología han incluido a la enfermedad periodontal como un factor de riesgo independiente para desarrollar enfermedad cardiovascular.
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